- La cirugía clásica de alargamiento se basa en la liberación completa del ligamento  suspensorio. En nuestra clínica realizamos el alargamiento de pene mediante una  innovadora técnica mediante la cual solo liberamos una parte del ligamento suspensorio  para evitar que las erecciones sean descendentes. Ello nos permite controlar en todo  momento la posición del pene y conseguir el mayor incremento de longitud posible sin  perder ángulo de erección. Además en lugar de cortar el ligamento suspensorio lo  liberamos progresivamente mediante electrocoagulación lo que disminuye los riesgos y  mejora el postoperatorio.  

- Para conseguir un incremento de longitud en reposo realizamos un colgajo pediculado de  piel mediante el que aportamos piel extra al pene que hemos sacado del interior del pubis,  para que cuando se erecte pueda hacerlo de forma natural y sin restricciones de piel. 

- La cantidad de centímetros ganados va a depender de cada paciente, por lo general en  esta cirugía se consigue un incremento entre cuatro y seis centímetros. Nunca se puede  asegurar una ganancia determinada o mínima, ni con exploración externa ni con pruebas  complementarias como TAC o resonancia magnética.  

- En cuanto a la sensibilidad y la erección ambas deben preservarse puesto que en la  cirugía no actuamos cerca de las estructuras de las que dependen. En nuestra dilatada  experiencia nunca hemos tenido casos de pérdida de sensibilidad o de fuerza de  erección. El ángulo de erección si que puede descender ligeramente pero nunca  permitimos que lo haga más allá de unos grados y siempre manteniendo el pene hacia  delante y hacia arriba.

- Realizamos un colgajo de piel en forma de V invertida para conseguir un incremento en reposo y erección. Ese colgajo nos permite avanzar la piel y que al ponerse en erección el pene podamos tener la piel extra que necesita.

- Soltamos parcialmente el ligamento suspensorio. Nunca lo hacemos de forma completa ya que el ligamento tiene su función. Tratamos de liberar lo máximo dejando suficiente para que el pene se erecte hacia delante y hacia arriba.  

- Realizamos una técnica interna basada en fascias del abdomen para impedir o limitar las retracciones del pene tras la cirugía. 

- Colocamos unos puntos de suspensión invertidos en los músculos y fascias que rodean al pene para que se mantenga en la posición que lo hemos colocado.